En el marco del Taller de Energías Renovables del Club Social de Innovación se busca ampliar la franja de usuarios pero también de generadores de energías limpias. Lo hacen apoyados en la eficiencia energética y los  hábitos sostenibles para erradicar “consumos fantasmas”.  El capacitador José Leis explica cuál es el rol de la capacitación en esta transición energética.

“No es necesario que pongan paneles solares en sus casas. También pueden aprender a crearlos o a armar circuitos en serie para energía solar y venderlos.  Esa es formación a la que se apunta al uso pero también a que haya generadores de productos o servicios ligados a las renovables”, analiza José Leis, responsable del Taller de Energías Renovables que se dictó en el Club Social de Innovación, en Olavarría.

La propuesta se llevó a cabo en la sede de la institución, que funciona en el Museo de las Ciencias, y culminó a fines de junio tras cinco encuentros teórico-prácticos. El objetivo era y es desarrollar aprendizajes vinculados con las diferentes fuentes energéticas, desde eólica, hidráulica y, biomasa hasta solar y solar térmica, con ejemplificaciones de los casos concretos aplicados en el hogar. También se abordaron conceptos de la eficiencia energética y la reducción de consumo en el mismo. Como proyectos finales desarrollaron generadores solar, hidráulico y eólico además de un sistema de riego solar.

“Nos enfocarnos en las necesidades de la propia gente y en los chicos notamos que, aparte de ver los alcances de las energías nuevas, tienen necesidades propias. Y lanzamos este curso para demostrar que puede lograr la eficiencia energética, bajar el consumo y por qué no emplear energías alternativas en sus vivienda”, argumentó el capacitador.

Malos hábitos

Uno de los ejes que se propusieorn en este segundo taller (el primero se dictó en abril) tuvo que ver con que “utilizamos mal la energía de los mismos artefactos en la casa. Al ducharnos, por ejemplo, abrimos el agua caliente y atenuamos con agua fría, diciéndole al termotanque que el agua del baño está caliente. ¿Por qué no usar directamente la caliente al grado que queremos y graduamos el termo en función de eso en lugar de exigirle al termo que se vuelva a bajar, que utilice gas y se ponga a enfriar esa agua que está caliente? Es aprender nuevos hábitos”, detalló.

En realidad, esos malos hábitos se generan básicamente por falta de información y en materia de eficiencia energética hay mucho por hacer en cada hogar. “La plancha gasta bastante,  entre 1500 y 1800 watts hora, casi lo mismo que una sierra eléctrica durante una hora. Por eso si se plancha no hay que hacer otra cosa mientras tanto y dejarla enchufada”, aconsejó Leis.

También advrtió sobre los artefactos que queda en están by porque “de ese modo igual utilizan energía. Cuando la TV está ´apagada´, está consumiendo. Hay que calcular todos los artefactos, en modo ahorro de energía. Tenemos wifi 24 horas y TV usamos 12 horas; el resto está en modo stand by, no lo apagamos del todo y siempre tiene un DVD o Blu-ray o cargador de celular. Y en una zapatilla tenemos 4 ç, por ejemplo, artefactos enchufados”.

Eso que se denomina “consumo fantasma”, que funciona como “si fuera un vampiro que está absorbiendo corriente sin que la usemos y después tiene un impacto importante en la factura de luz”, señaló Leis.

Por lo tanto, el desafío será reconvertir esas prácticas en “buenos hábitos y que cuando nos vamos de la habitación apaguemos la luz o desconectemos los artefactos para evitar, además, un tarifazo en el medio”.

Usuarios y productores

El capacitador José Leis explicó que una conducta viable es “acoplar sistemas. Si me pase al Led es un logro importante pero la idea sería llegar en las luces a cero. Costear sistema de energía solar o eólica y las luces a cero o 12 voltios con energía solar. Pasamos toda esa línea, que  no sale tan caro, para eficientizar  parte de nuestro consumo con paneles solares.”

Por eso, avanzan con ejemplos a escala y luego con la “fabricación” de “cargadores para celulares a base de energía eólica, para que vean cómo se utiliza y cuando termina vemos un hibrido eólico-solar que es un generador que podemos anexar en casa”, destacó Leis.

Las consignas estuvieron inspiradas en la nueva ley de generación distribuida de energía renovable que permite a todos los consumidores de energía eléctrica también ser generadores. La normativa fue promulgada en 2017 pero aún no fue reglamentada por el gobierno bonaerense. Mientras tanto, “queremos aprovechar esta ley para inyectar la energía que necesitamos y eyectar a la red la que no usamos”, planteó con entusiasmo el capacitador.

En el primer curso hubo más mujeres que hombres y en esta segunda apuesta fue más parejo. “Vinieron profesores de fisicoquímica, geografía, de matemática, gente joven pero también adultos de 45 a 55 años. La idea del Club es llegar a un abanico amplio y no solo concientizar a los más pequeños”, enfatizó Leis.

El Club Social de Innovación depende del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Provincia y funciona en la sede del Museo de las Ciencias de Olavarría con apoyo de la Secretaría de Desarrollo Económico municipal. 

En materia educativa “es valioso ya que estemos hablando de energías renovables  y como trabajo final apuntaremos a un sistema de riego automatizado”, comentó el electricista matriculado.

En síntesis, “las energías renovables son una gran ola y no significa que se tengan que subir pero es muy importante estar preparados” y que los usuario además de asumirse como consumidores se vean como posibles generadores y “aprendan a crear paneles solares, a armar circuitos de serie para energía solar y venderlos o hacer producto o prestar servicios ligados a las renovables. Sólo hay que mirar cuáles son las necesidades”, observó sobre el final José Leis.

Para mayor información, los interesados pueden consultar en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. o a los teléfonos 431729 o 2284 216330 (whatsapp)