Para mejorar los indicadores ambientales del país respecto del cambio climático ofrecen dos grandes propuestas. Por un lado, eficiencia energética en áreas productivas, residenciales y de movilidad con 400% más de potencia instalada. Pero además plantean una duplicación de bosques nativos y el cultivo de especies comerciales con el objetivo de aumentar la absorción de carbono.
“La solución o el camino ideal no existe pero hay infinidad de posibles combinaciones” para mejorar los indicadores ambientales, advierte la ingeniera Daniela Keesler. La investigadora del CTAE y referente de la Facultad de Ingeniería de la UNICEN explica cuál sería la hoja de ruta para bajar el nivel de emisiones contaminantes y ajustarse a las exigencias del IPCC de cara a 2030. Ese fue el eje del webinario que se llevó a cabo el 4 de agosto. El proyecto fue expuesto por el co-autor de la propuesta, el ingeniero Gabriel Blanco, también referente del Centro de Tecnologías Ambientales y Energía de la FIO, director de Cambio Climártico de la Nación director académico del Polo de Ingeniería en Energías Renovables y Tecnologías Ambientales.
La meta que propone el IPCC es de 1,5 a 2 grados centígrados. ¿En qué situación se encuentra hoy la Argentina y cuál es su índice de emisión? El último inventario de Gases de Efecto Invernadero (GEI) es de 2016 y “la Argentina emitió 364 millones de toneladas de dióxido de carbono. Eso representa aproximadamente el 0,8% de las emisiones globales del GEI del mundo cuando”.
Pero, al mismo tiempo, nuestro país se comprometió a “limitar sus emisiones a 483 millones de toneladas hacia 2030, con lo cual estaría incrementando su participación y no sería lógico porque estaríamos por encima de las emisiones del IPCC”.
Por eso, a nivel nacional “debería presentarse una contribución más ambiciosa. Es importante llegar a la carbono neutralidad para limitar el aumento de la temperatura del planeta a 1,5 o 2 grados centígrados, pero está visto que va a ser muy difícil de lograr”, admite la investigadora.
Con un energía sustentable
Ahora, ¿qué plantea puntualmente la CTAE-FIO? La propuesta de los investigadores olavarrienses apunta a los dos sectores más problemáticos: energía y uso de suelos.
“En energía definimos tres escenarios posibles para llegar a la carbono neutralidad con medidas de eficiencia energética. Se electrificó toda la demanda residencial y se apuntó a los consumos de combustibles fósiles en la industria para generar energía térmica”, indica Daniela Keesler.
Pero además apuntan al transporte, con tres opciones: “proponemos electrificarlo, convertir el terrestre a hidrogeno o convertir todo el transporte a biocombustibles con efectos sobre las hectáreas de cultivo. Con los tres escenarios se llega a 2050 con neutralidad de emisiones de GEI. Eso implican un incremento de la potencia instalada del 400%”, grafica la profesional.
Menos deforestación, más bosques
Con respecto al uso de los suelos, cuya sigla es Afolu por su denominación en inglés, que remite a la Agricultura, Silvicultura y Otros, se definieron dos escenarios. Por un lado, se planteó llegar a la carbono neutralidad mediante la absorción de carbono por sumideros, es decir, por bosques. “Una opción es mediante bosques cultivados con especies comerciales, como coníferas y eucaliptos. El incremento de hectáreas destinadas a ese uso debería aumentarse cerca del 400% con respecto a las hectáreas destinadas en 2016”, ejemplifica Keesler.
El otro escenario es mediante la recuperación de bosques nativos aunque, en ambos, la primera medida es frenar deforestación. “En este segundo escenario proponemos también volver a reforestar y recuperar hectáreas de bosques nativos deforestadas. Para lograr la carbono neutralidad, las hectáreas de bosques nativos deberían aumentar en 2 veces respecto de lo inventariado en 2016”.
El documento principal se elaboró en la UNICEN junto con la FARN mientras que otras organizaciones se sumaron con capítulos sobre determinados temas como la cuestión de género vinculada con cambio climático o las estrategias de baja de carbono. “Incluso hay aporte de bioenergía por Roque que forma parte de la Cámara de Energías Renovables (Cader) y hay un documento de Vida Silvestre apuntando al sector energía pero en el rol de la eficiencia energética en este tipo de estrategias”.
Este abanico de alternativas de cambio no se exponen a modo de solución sino que “el objetivo es tomar actividades o sectores de emisiones bien específicas y mostrar cuáles deberían ser los cambios, la magnitud para llegar a la carbono neutralidad. La solución o el camino ideal no existe y hay infinidad de posibles combinaciones”, asegura la investigadora de la FIO.